jueves, 4 de junio de 2015

Cine: Misericordia (Los casos del Departamento Q) de Mikkel Nørgaard (2013)


"¿Te atreves a mirar?" nos dicen los carteles de la inminente Insidious 3, que no paran de anunciarnos por todas partes. Es más que probable que no tenga el valor suficiente como para invertir dinero y tiempo en esa película, sin embargo, sí os recomiendo desde ya que os atreváis a ver Misericordia (Los casos del departamento Q), que se estrena hoy jueves 4 de Junio junto a títulos como el ya mencionado, Horns (que lleva pululando por internet siglos; protagonizada por Daniel Radcliffe) o la que probablemente se lleve el gato al agua, la nueva entrega de Jurassic World, que se estrena mañana viernes. 

Sin menospreciar el resto de estrenos, me gustaría sin embargo recomendar este thriller. Supongo que una película danesa no es precisamente el plan que imagináis como ideal (para algunos; sé que otros sí se decantarían por esta). Pero no seáis prejuiciosos. No os dejéis llevar por lo típico: "uff... película europea". Os prometo que lo que encontraréis en la sala será un trepidante thriller con escenas de lo más truculentas (que nada tienen que envidiarle a filmes como Insidious) y un argumento con una intriga que os dejará pegados a la butaca. Igual estoy inflando vuestras expectativas, pero sólo os pido que le deis una oportunidad porque en mi opinión, merece la pena; al menos para amantes del thiller.

Yo fui a verla con pocas espectativas, pero conservando cierta esperanza, puesto que el guionista, Nikolaj Arcel, fue responsable de Millenium 1: Los hombres que no amaban a las mujeres (2009), la posterior serie de TV, Millenium (2010) o la más reciente, Un asunto real (2012), protagonizada por Mads Mikkelsen, Alicia Vikander y Mikkel Boe Følsgaard (quién aparece en la película de la que hoy se habla aquí).
Los anteriores trabajos del director (Mikkel Nørgaard) no los conocía, no obstante, y tras haber visto esta, le tengo muchas ganas a su secuela: Profanación (2014), que espero ver muy pronto.












El pase de prensa aconteció el pasado jueves... lo que sorprende es que esta película del año 2013 nos haya tardado tantísimo en llegar. Lo triste es que además no han escogido el mejor fin de semana de estreno y por desgracia apenas puede que dure un par de semanas en la cartelera de ciertos cines de corte más independiente. 

Entrando ya en materia...
  Misericordia o Los casos del departamento Q, nos cuenta la historia del inspector Carl Mørck, de personalidad difícil: crítico, sin demasiados escrúpulos, infeliz, pero de los mejores en su trabajo. Tras el terrible fracaso de un caso en el que uno de sus compañeros pierde la vida y el otro, su mejor amigo, queda paralizado, Carl es relegado a otro departamento: el de casos sin resolver y que él mismo debe clasificar uno a uno. Es entonces cuando el caso de Marete Lyngaard capta su atención por sus irregularidades. Carl, junto a su nuevo compañero Assad (todo lo contrario a él en personalidad: amable, paciente, pero tan profesional como el mismo protagonista) deberán resolver este primer caso del Departamento Q. 
Uno de los aspectos técnico-artísticos más destacables de la cinta es la fotografía de Eric Kress (cuyo último trabajo fue Venganza 3), que destaca por lograr captar un ambiente lúgubre consiguiendo un acabado estético y más que correcto. Los momentos más siniestros son lo que son gracias a una dirección hábil, sencilla pero con mucho gusto y a una fotografía como la de Kress.

La banda sonora sin embargo, no es un punto notable; correcta sin más, acorde con el film y sus momentos de tensión.

Los actores, desconocidos para mí (hasta ahora), hacen una gran labor y, aunque no interpretan a personajes fascinantes y que vayan a calar hondo en alguno de nosotros, sí que ejecutan su trabajo a la perfección. Me alegra contar con la presencia de Nikolaj Lie Kaas y Fares Fares (Carl y Lasse, respectivamente) en la secuela. En esta, para mí, Sonja Richter sí que me pareció algo más sobresaliente que el resto del reparto, aunque Mikkel Boe Følsgaard tampoco se queda atrás.

En definitiva, y para no aburriros más: Misericordia es una película muy correcta; un thriller muy entretenido que en muchos casos probablemente os dejará sin aliento, cumpliendo con su cometido. Entre emocionante y pausada (momentos en los que se desarrollan las personalidades de los personajes, especialmente los de Carl y Assad -quién sorprende gratamente-), pero nunca aburrida. Muy recomendable.

NOTA: 8,5/10

Si quieres leer sobre las entregas posteriores entra en el link: 
Profanación / Redención





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